El municipio de Berazategui avanza con la construcción del Centro Cívico para la localidad de El Pato, una obra que busca descentralizar la atención administrativa. El edificio, que concentrará oficinas municipales, será de hormigón a la vista. En una segunda etapa se construirá un centro cultural con auditorio. Federico López, Secretario de Cultura y Educación de Berazategui, dialogó con El Constructor y detalló los alcances del proyecto y su impacto en la comunidad.
Para comenzar…¿Cuál es la importancia cultural y social que va a tener este nuevo centro cívico para la localidad?
Nosotros venimos trabajando en la conformación de estos edificios en distintas localidades.
Tuvimos una primera experiencia en Hudson, el complejo cultural “La Humanitaria” que se convirtió en el centro cívico. Después inauguramos un establecimiento similar en Juan María Gutiérrez y ahora estamos por inaugurar otro en Villa España-Plátanos. Finalmente, estamos iniciando la obra en El Pato. Entendemos y creemos que son dispositivos públicos que buscan acercar principalmente servicios a las distintas localidades, acortar la distancia, la cercanía y mejorar la calidad de la infraestructura. Estamos convencidos de que es necesario mejorar la calidad de las estructuras edilicias que tenemos en el territorio y que, de alguna manera, estos dispositivos generan una transformación social, urbana, cultural importantísima, porque van con una mirada amplia en relación al tejido comunitario. Son lugares que pensamos como espacios de encuentro, con una lógica de participación comunitaria y cultural. Además, la actividad en todos se complementa con servicios municipales o provinciales. En el caso de El Pato, es una obra que fue licitada hace poco, estamos a la espera de que salga la orden de compra. Está primera etapa va a comprender el registro civil, área de licencias de conducir, delegación municipal y va a tener algunas oficinas que son para usos diversos del municipio para poder acercar distintas propuestas de necesidades y servicios que tenga el territorio.
¿De qué manera se beneficiará a los vecinos con la habilitación de este nuevo edificio?
En el caso de El Pato, estamos hablando de un territorio extenso y, además, es una de las localidades más lejanas dentro de la zona centro de la ciudad. Es una delegación que tiene bastante infraestructura para poder resolver necesidades de servicios en la localidad va a permitir tener varios servicios y se van a poder hacer todo tipo de trámites. Por su parte, en este centro cívico se van a concentrar las cámaras de El Pato en un centro de monitoreo. Hay una posibilidad de prevención mucho más cercana y que puede dar respuestas más fácil y rápidamente. También va a haber oficinas alternativas que van a ser para usos diversos en la semana. La inmobiliaria municipal funciona una vez por semana, por ejemplo. La idea es que se vayan rotando servicios que se puedan dar en distintos horarios.
Respecto de la estación de vigilancia que va a tener el edificio, ¿qué ventajas le va a promocionar a la seguridad?
Se van a concentrar en ese espacio todas las cámaras que están en la localidad de El Pato, y seguramente se van a reforzar ciertas zonas. Ese centro de monitoreo va a articular con el centro de emergencias médicas (CEM), y con la policía. Así funciona en todos los lugares. Van a tener un efectivo de la comisaría y se conecta automáticamente con el centro de salud municipal.
Es fundamental, entonces, que se adapte a las necesidades de la zona
Si, y hago foco en los beneficios que va a traer este nuevo edificio. Es un edificio que está pensando para los alrededores donde se va a realizar el proyecto, ahí funcionaba el viejo ferrocarril -había un apeadero- y el edificio intenta tomar forma de tren. Tiene dos bloques, uno de servicios administrativos, y a futuro, se plantea otro igual destinado a la cultura, con servicios autónomos, aulas y proyecciones.
El equipamiento tecnológico está dentro del presupuesto que ustedes ya tienen?
No, la licitación que se realizó es para la obra de infraestructura y no incluye equipamiento, eso es posterior, se va a realizar una instancia de evaluación de equipamiento donde se va a evaluar lo que hay que adquirir, lo que es necesario reemplazar, así que esa instancia será posterior a esta licitación, que es toda la infraestructura, y todo lo que son los servicios propios del edificio.
¿Qué tipo de actividades culturales o comunitarias se van a empezar a desarrollar en este edificio?
En esta instancia se licita ahora la parte de servicios administrativos solamente. En un segundo momento, la intención es encargarnos del bloque cultural, hoy nosotros tenemos un espacio similar en el centro de jubilados, pero la intención de estos centros cívicos es que vayan acoplados a una propuesta cultural y principalmente tener un auditorio. El Pato no tiene un espacio de estas características y pensamos que esta obra es una oportunidad para incorporarlo. El establecimiento va a contar con tres aulas para cursos de educación no formal y de formación profesional. Además, va a tener un foyer de exposiciones en el ingreso. La intención en ese vestíbulo es poder hacer muestras fotográficas, artísticas, de artes visuales.
¿Qué áreas del municipio son las que se encargaron de la planificación y del diseño del proyecto?
Fueron dos dependencias, el equipo de arquitectura de la Secretaría de Cultura y Educación que trabajó en conjunto con el sector dedicado al patrimonio arquitectónico del Área de Obras Públicas. La iniciativa busca construir una identidad patrimonial, por eso está en ese lugar, nos llevó mucho tiempo poder hacer el pase de ese terreno al municipio. Hubo mucha gestión del intendente, porque son terrenos provinciales. El edificio responde a una necesidad de una localidad que es muy amplia y está en una zona accesible. También es una apuesta por la revalorización de esa zona, que era la vieja estación de ferrocarril. Nos pareció que ese lugar era óptimo. Entonces, armamos un equipo interdisciplinario con obras públicas -con ellos venimos trabajando en otros proyectos de espacio urbano de arquitectura como este-. Lo que se busca es que la obra tenga, además, una identidad. Por eso está pensado que este edificio tenga una forma alargada, queremos simular que es un tren. El terreno es finito y largo, con lo cual también hay una propuesta de arquitectura. Se planea que el inmueble sea de hormigón a la vista, sustentable y que tenga durabilidad en el mantenimiento.
¿Qué cambios se espera que tenga esta obra en la vida cotidiana de los vecinos?
Yo creo que para la comunidad es algo muy esperado en relación a poder tener un punto de anclaje comunitario que permita nuclear ciertas actividades y encuentros. Para nosotros, el eje principal es este, hoy la Delegación Municipal y el Registro Civil funcionan en un edificio que es cedido por la Sociedad de Fomento de la Unión, frente a la Salita. Es una construcción que claramente necesita remodelarse, y surgió esta posibilidad de utilizar un espacio nuevo, que permite proyectar una localidad que viene creciendo de habitantes y vivienda. No es un edificio pensado en el ahora, sino que se planea para el futuro también. Estos prototipos son transformadores, lo hemos comprobado con los otros que hemos inaugurado. Las zonas se desarrollan de manera distinta, crecen, generan un epicentro de inversión donde uno ancla este tipo de edificios. También creemos que es necesario tener un espacio cultural. El Pato es una ciudad que tiene muchísimos artistas, pintores, mucha cultura, hay una movida que es autogestiva, que la acompañamos desde el municipio, pero creemos que estos dispositivos las potencian.
¿Cuál es el plazo estimado que tienen para el inicio de la obra y la finalización?
Estimamos que la obra puede comenzar a fin de mes, todavía la orden de compra no ha salido. La Secretaría de Economía está estudiando los papeles de la licitación, así que entendemos que para fines de mayo tendremos que tener la orden de compra, a partir de ese momento, un año de plazo.
¿Una vez que se realiza la entrega está operativo?
Una vez terminada la obra, viene la etapa de equipamiento y después el edificio queda listo para ponerlo en marcha. De la misma manera que sucedió con otros establecimientos similares, por ejemplo, el Centro Cívico Villa España-Plátanos, que se inaugura a fines de junio y al lunes siguiente empieza a funcionar. La lógica de la humanitaria es distinta, porque inauguramos el registro civil el 1 de junio y se va haciendo por etapas. Entonces primero fue el Centro Cultural, después fue la Delegación Municipal y el Área de Licencias. A medida que fuimos avanzando, fueron entrando en funcionamiento los servicios.
¿Qué inversión total representa esta obra para el municipio y cómo fue financiada?
La obra es una inversión de $856 millones, esa fue la oferta que hizo la empresa que ganó y es financiada con fondos municipales. Se trata de una decisión del Intendente Juan José Mussi de retomar este trabajo que en principio se había licitado con financiación nacional. Era una de las seis obras que estaban frenadas en el Distrito cuando fue el cambio de gestión. Y había un compromiso de retomar esta obra por decisión del Intendente con fondos municipales.
¿Qué impacto esperan ustedes que tenga este centro cívico en el desarrollo de la zona?
Nosotros esperamos que dé respuesta a ciertas necesidades que tiene la localidad. Es una localidad en crecimiento, muy amplia, muy diversa y creemos que estos dispositivos no solamente generan un cambio urbano, sino que facilitan la vinculación con el Estado municipal y provincial. Desde ese lugar, pensamos que puede resolver ciertas problemáticas de las comunidades. Hoy hay trámites que los vecinos El Pato tienen que hacer en el centro de la ciudad y que van a poder hacer en la cercanía. Hablamos de optimizar el tiempo de las personas. Es algo tan importante, porque trasladarse desde allí al centro o la Municipalidad de Berazategui representa aproximadamente una hora de viaje en transporte público. Tenemos en cuenta como prioridad el tiempo del vecino. También son lugares donde se construyen miradas sobre el territorio. Estos dispositivos son los que permiten encontrarse, generar actividades, son nucleadores y construir políticas públicas, que es lo que buscamos.
Además del centro cultural, ¿se va a sumar más adelante otro proyecto?
Estamos pensando en un parque lineal en todo lo que es la franja que está colindante a las vías del ferrocarril. Después se está trabajando en otras obras, una el Barrio 11, que es la escuela 58 (la primaria y la secundaria), el nuevo jardín de infantes, una huerta comunitaria, un polideportivo que se espera que en cuatro meses se inaugure, que ya la ha recorrido el intendente. Son obras que vienen a descomprimir esa necesidad que tenemos de matrícula.
Por Mónica Arroyo