El uso de la tierra como material de construcción ha sido una práctica ancestral que ha dejado una huella profunda en la historia y la cultura de diversas civilizaciones. Sin embargo, en la actualidad, esta técnica ha sido subestimada y olvidada en muchas regiones de Argentina. A pesar de las numerosas ventajas sociales, culturales, técnicas y económicas que ofrece, la construcción con tierra ha sido relegada en favor de materiales más modernos. En este artículo, exploraremos las razones por las cuales la construcción con tierra merece una segunda oportunidad en Argentina y cómo esta antigua técnica está siendo redescubierta y revitalizada en algunas de nuestras provincias.
La construcción con tierra ofrece una serie de ventajas notables que abarcan desde el ámbito ambiental hasta el económico. Entre las más destacadas se encuentran:
1. Sostenibilidad ambiental: la construcción con tierra es una práctica respetuosa con el medio ambiente. Requiere menos energía y agua en comparación con los materiales de construcción convencionales. Además, no genera desechos ni contaminantes dañinos durante ninguna etapa del proceso, desde la preparación hasta el uso posterior de los edificios.
2. Facilidad de manipulación: la tierra es un material fácil de manejar y moldear, lo que permite una mayor versatilidad en el diseño y la construcción de edificios.
3. Ahorro económico: la construcción con tierra tiende a ser más económica en comparación con otros materiales de construcción, lo que la hace accesible para una gama más amplia de personas.
A pesar de estas ventajas innegables, la construcción con tierra no ha recibido la atención que merece en Argentina, ya que rara vez es objeto de estudio en universidades y escuelas técnicas, y sus condiciones no están debidamente reglamentadas. Esto ha llevado a que quienes viven en edificios de tierra queden al margen de ayudas profesionales y líneas de crédito disponibles para otros tipos de construcción.
NUEVAS PERSPECTIVAS Y LA RED PROTIERRA
Sin embargo, un cambio está en marcha en algunas provincias argentinas. Durante el 9.º Encuentro Nacional de la Red Protierra, celebrado en Calingasta, se anunció un emocionante proyecto que marca un hito en la revitalización de la construcción con tierra en Argentina. Este proyecto, en colaboración con la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional de San Juan y la Municipalidad de Calingasta, involucra la construcción de un prototipo de vivienda con tierra como parte de un Proyecto Federal de Innovación. La Secretaría de Ciencia, Tecnología e Investigación de San Juan coordina este proyecto innovador, que promete destacar las ventajas de la construcción con tierra y abrir nuevas perspectivas para su uso.
La Red Protierra es un actor clave en este resurgimiento. Esta red nacional de integración y cooperación técnica y científica se enfoca en el desarrollo responsable de la construcción con tierra en todas sus manifestaciones y aspectos. Está compuesta por individuos de diversas regiones y disciplinas que se dedican a la docencia, investigación y vinculación tecnológica en el campo de la arquitectura y construcción con tierra. Su misión incluye la mejora del déficit habitacional, el fomento de materiales y sistemas constructivos sustentables, la normalización de la construcción con tierra y la promoción de políticas públicas en el sector.
La labor de la Red Protierra se extiende a lo largo de más de 30 años y se ha vinculado con instituciones gubernamentales, municipios, institutos de vivienda y otras organizaciones. Muchos de los proyectos e investigaciones de la red reciben apoyo de organismos como la universidad pública, el INTI, el CONICET y la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica, lo que demuestra la importancia de la investigación y la enseñanza en la promoción de la construcción con tierra.
UN EJEMPLO PROMETEDOR: BARRIO PACHAMAMA I
Un ejemplo inspirador de construcción con tierra se materializa en el Barrio Pachamama I, en Amaicha del Valle, Tucumán. En la creación de estas 24 viviendas de 60 metros cuadrados cada una, se dio un énfasis especial a la planificación del entorno, garantizando la accesibilidad y evitando la congestión del tránsito. Al diseñar la disposición de las calles, se llevó a cabo un minucioso análisis sobre el manejo del agua, con el firme propósito de preservar la flora autóctona.
Además, se implementó un enfoque comunitario al llevar a cabo la formación de equipos de trabajo locales, los cuales posteriormente se unieron en pequeñas cooperativas de construcción. Este enfoque no solo promovió la colaboración, sino que también desempeñó un papel significativo en el fortalecimiento de la economía local. Vale la pena destacar que tanto los materiales como la mano de obra se contrataron en Amaicha, lo que significa que todos los recursos económicos se quedaron en la comunidad.
Una prioridad constante en este proyecto fue el uso de materiales autóctonos. Esta elección estratégica permitió alcanzar un nivel óptimo de aislamiento térmico y acústico en todas las viviendas, lo que contribuye a un ambiente de comodidad y bienestar.
El adobe, un material de construcción ecológico con notables propiedades aislantes, desempeña un rol central en el corazón del Barrio Pachamama I. Este versátil material no solo es económicamente viable, sino que también atesora una conexión profunda con la rica historia y cultura de los pueblos originarios en los Valles Calchaquíes.
El proyecto fue concebido gracias al ingenio de los arquitectos Claudio Bumbacher, quien aportó la idea y lideró la gestión, y Carlos Rodríguez, cuyo aporte fue fundamental. La supervisión de las obras estuvo a cargo del funcionario nacional Hugo Cabral, junto con la titular del Instituto Provincial de Vivienda y Desarrollo Urbano, Nora Belloni, quienes aseguraron el éxito de esta iniciativa.
En el terreno se consideraron cuidadosamente las posibles ampliaciones y desarrollos futuros, tanto en las viviendas como en los servicios que las complementan. Se proyecta con entusiasmo la expansión de este prometedor barrio bajo el nombre de «Pachamama II», con el propósito de satisfacer las necesidades de sus residentes y continuar fortaleciendo esta comunidad.
A MODO DE COLOFÓN
La construcción con tierra no solo es una técnica constructiva sostenible, sino también una parte esencial de la herencia cultural argentina. A medida que la construcción con tierra resurge en el país, gracias a iniciativas como la Red Protierra y proyectos emblemáticos como el Barrio Pachamama I, se abren nuevas perspectivas y oportunidades para quienes buscan viviendas sostenibles y económicamente accesibles. Es hora de valorar y revitalizar la construcción con tierra en Argentina, reconociendo su importancia en la construcción de un futuro más sostenible y equitativo.
IPVs
Tierra del Fuego
El Instituto Provincial de Vivienda y Hábitat continúa con las obras en ejecución de las 500 viviendas del Programa Casa Propia-Construir Futuro que lleva adelante tanto en Río Grande como en Ushuaia. Cabe recordar que las mismas son financiadas por el Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat de la Nación, en un trabajo articulado entre el Gobierno de la provincia de Tierra del Fuego AIAS y el IPVyH.
Las obras en ejecución se encuentran distribuidas en distintos macizos; en Río Grande se encuentran en obra 120 viviendas en el barrio CGT y 84 en el sector de Chacra IX. En Ushuaia, por su parte, el IPVyH planifica la urbanización del Barrio Río Pipo donde actualmente hay en ejecución más de 240 viviendas.
Córdoba
El gobernador, junto al intendente, supervisó las obras de urbanización del barrio Oncativo, en la ciudad de Río Cuarto.
El proyecto de provisión de infraestructura se encuentra en un 80% de avance de obra y contempló la intervención de 17 hectáreas, beneficiando a 350 familias con una inversión de $2.266.736.659,78. Para la realización de la obra la Provincia financió el 70% de la inversión y el municipio el 30%.
Los trabajos realizados incluyen red de abastecimiento de agua potable, red de desagüe cloacal y desagües pluviales. También se prevén conexiones domiciliarias eléctricas a red, red peatonal, obras de equipamiento comunitario, arbolado público y espacios verdes.
Dicha obra se enmarca en el Plan Provincial de Urbanizaciones que cumplimenta con la ley 10.738 del programa de urbanización y regularización dominial de barrios populares.
Santiago del Estero
El gobernador de la provincia inauguró el moderno complejo habitacional Costanera Uno, situado en el sudeste de la ciudad Capital, frente al río Dulce y a pocos metros del puente Juan Francisco Borges, que fue inaugurado en julio de este año. En este contexto, anunció la inminente ejecución de otro complejo habitacional que llevará por nombre «Costanera Dos» en la misma área.El barrio consta de 238 departamentos que incluyen servicios esenciales, tales como gas natural y cloacas. Estos departamentos están equipados con cocinas, calefones y sistemas de portero eléctrico. Además, el complejo cuenta con espacios de estacionamiento, zonas de juegos y áreas de esparcimiento destinadas a diversas actividades recreativas. Un énfasis especial se puso en la promoción de la forestación como medida para preservar el medio ambiente. Cada familia también recibió bibliotecas como parte del programa «Libros y Casas».
ARQ. CELINA MABEL SAVINO