La ampliación de la red de agua potable en la localidad chaqueña de Las Breñas, es un ejemplo paradigmático de federalismo y de un estado presente que, en un contexto mundial de crisis sanitaria, cobra otra relevancia. Esta obra consiste en la construcción de dos cisternas, un tanque elevado y 102 km de red de distribución de agua que se conectarán en 6.900 domicilios, beneficiando a 31 mil vecinos y vecinas.
La irrupción de la pandemia provocó una de las peores crisis económicas de la historia, hecho que profundizó desigualdades entre países ricos y pobres. Es en este marco, y considerando el contexto de destrucción del entramado productivo y recesión en el que se encontraba el país en 2019, que la obra pública se convirtió en uno de los pilares establecidos por el Gobierno Nacional para la reactivación económica.
Esto tuvo como consecuencia la revalorización de ENOHSA, lo que implicó no sólo un aumento en el presupuesto destinado a obras de agua y saneamiento sino también una federalización de las mismas. Precisamente, el organismo pasó de tener presencia en solo diez provincias a tener obras en ejecución en 23, generando miles de puestos de trabajo.
Es importante resaltar que, el proyecto antes mencionado, financiado entre el organismo y el gobierno del Chaco, se encontraba paralizado, en un primer momento por la gran crisis hídrica que sufre la región y luego por las restricciones propias de la pandemia. Sin embargo, en un esfuerzo conjunto se pudo reactivar la misma y ahora se encuentra en un avance estimado de casi el 90%.
Finalmente, el objetivo del ente, es poder alcanzar las mil obras en ejecución antes de fin de año, es por eso que semana a semana comienzan nuevas obras en todo el país. Además, luego de un profundo análisis de la situación en la que se encuentra Argentina, se confeccionó el Plan Federal de Agua y Saneamiento, cuya finalidad es alcanzar el 100% de cobertura en agua potable y el 80% en saneamiento.