Entrevista conjunta al Ing. Francisco Gallicchio, titular de la Comisión Obras Privadas, y el Dr. Ricardo Griot, presidente de la Comisión Desarrolladores, ambos de la Cámara Argentina de la Construcción. Propuestas para financiar viviendas, créditos hipotecarios y para constructores, y el pedido de reducciones impositivas son los principales ejes analizados.
Hace tiempo que las comisiones Obras Privadas y Desarrolladores de la Cámara Argentina de la Construcción trabajan fusionadas y de modo colaborativo. Si bien cada una tiene ciertas aristas que son propias, comparten muchos de los objetivos, temáticas, preocupaciones, planteos, propuestas y desafíos.
En esta entrevista conjunta, sus referentes, el Ing. Francisco Gallicchio, presidente de Vidogar, y el Dr. Ricardo Griot, que preside el Grupo Pecam, analizaron el panorama nacional, detallaron las iniciativas que tienen en cartera y sus expectativas.
¿Cuáles son los temas de especial interés para sus comisiones que se presentarán en la próxima Convención Anual de Camarco?
En la Convención 2024, particularmente en lo que se refiere a la inversión privada, se tratará el financiamiento privado de obras de infraestructura. Este tema está coordinado desde otras comisiones.
Respecto a nuestra comisión específica, Camarco trabaja en una propuesta (para la Secretaría de Hábitat de la Nación) que apunta a coordinar la financiación de viviendas con los brazos privados de organismos internacionales, con propuestas a través del mercado de capitales o con el sector financiero. Pero, esto es aún muy incipiente.
¿Cómo es su mirada sobre la situación actual, el nivel de actividad de las obras y su impacto en las empresas del sector?
En los últimos 24 meses, debido sobre todo al alto nivel inflacionario, hubo una desaceleración del nivel de actividad, pero poco a poco se está recomponiendo. Las empresas constructoras y desarrolladoras conviven en el escenario local y dependen de este mercado.
¿Cuáles son los desafíos sobre los que trabajan actualmente?
Las problemáticas son varias. Una de ellas es la ausencia de crédito hipotecario para el comprador final, aunque, como es de público conocimiento, apareció en el último mes. En ese tema estuvimos trabajando durante los últimos años, en conjunto con otras entidades del sector, como la Asociación de Empresarios de la Vivienda (AEV) y la Cámara Empresaria de Desarrolladores Urbanos (CEDU).
También se avanza en obtener, del sector financiero, lo que se denomina crédito intermedio o crédito al constructor, que hace que el desarrollista pueda financiar parte de su inversión vía una entidad financiera para que, al finalizar la obra, cancele dicho crédito o se lo traslade a los compradores de las unidades, una vez subdividida la propiedad.
A su vez, se trabajó en la ley de exteriorización de capitales que, al cierre de esta edición, se tramita en el Congreso de la Nación.
¿Cómo es el impacto de los créditos hipotecarios en el sector? ¿Son viables?
Impactan positivamente. Si bien por ahora son un comienzo, ayudan. En estos procesos, al principio y hasta que los salarios no recuperen poder adquisitivo, se obtienen créditos por el 50% del costo de una unidad, aproximadamente. De todas maneras, por la información que estamos recibiendo del sector financiero, se generó gran interés y se espera alta demanda de créditos.
Debido al formato actual de los créditos, estos se dirigen a unidades terminadas (nuevas o usadas), es decir, a unidades en stock (en existencia). Por ello estamos trabajando para que el crédito también le llegue al constructor, lo que entonces implicaría un aumento de actividad y empleo.
¿Cuáles son las prioridades a establecer para mejorar el panorama?
Entre las acciones prioritarias, cabe mencionar la reducción de la carga impositiva en nuestro sector. Esta no es solo nacional, sino también provincial y municipal. El impuesto a los Ingresos Brutos es de los más distorsivos, pero también lo es el impuesto a los débitos y créditos, a los sellados de contrato y a sellados en la compraventa. Los anuncios oficiales hablan de establecer una reducción impositiva a medida que se obtenga superávit de cuenta corriente.
¿Cómo son sus expectativas? ¿Qué potencial de crecimiento prevén?
Se dice que los constructores y los desarrolladores siempre son optimistas, y que por eso eligen esta actividad… Las expectativas son de mejora, con la estabilidad.