En los primeros meses del año, Tierra del Fuego llegó a tener 30 obras paradas por la falta de envío de fondos por parte del Gobierno Nacional. En este contexto, y para saber cuál es el panorama actual de la obra pública en esa provincia, El Constructor entrevistó a la Ministra de Obras y Servicios Públicos provincial, Gabriela Castillo.
¿Qué evaluación hace de la situación de la obra pública en Tierra del Fuego?
Tenemos un ambicioso plan de obra pública, que permite, aún en los tiempos económicos adversos de la provincia, llevar adelante las que han sido comprometidas con los vecinos en el año 2023, y que con la situación actual se hace difícil. A pesar de ello, avanzamos en un plan sostenido para poder tener de pie cada una de estas obras.
¿Qué obras se están ejecutando con fondos provinciales?
Todo lo que hoy estamos ejecutando es estrictamente con financiamiento del gobierno de la provincia. Tenemos obras que tienen que ver con los servicios, llevando agua y cloacas a distintos barrios de la ciudad de Ushuaia e intervención de estos servicios en nuevas urbanizaciones en la ciudad de Río Grande, entre otras.
Queremos seguir avanzando sobre el compromiso asumido en la provincia en el cuidado de la primera infancia y continuar obras que antiguamente eran con financiamiento nacional y que a partir del convenio las asume como propias el Gobierno de Tierra del Fuego. En función de esto, seguimos avanzando en la construcción del Centro de Desarrollo Infantil en la ciudad de Ushuaia, Río Grande y Tolhuin.
Hay obras que esperamos poder retomar en los próximos meses, puesto que estamos con las cuestiones administrativas que requieren cada una de ellas. Aquí también se agrega el factor del clima, por eso se habla de obras por temporada y nos encontramos próximos a comenzar la temporada de verano, que es la que nos permite llevar adelante el paquete de obra húmeda y de excavación que hoy están detenidas.
¿Cuáles son las obras más importantes que se han podido sostener?
Pudimos ejecutar en invierno una parte de la obra pública, que es la que se trabaja a puertas adentro. También estamos trabajando en la finalización en infraestructura deportiva, como el microestadio de la ciudad de Río Grande, habiendo ya habilitado este año la cancha auxiliar, y continuando con el gimnasio principal, que es un estadio para 3.500 personas sentadas que está en ejecución. También estamos haciendo refacciones importantes en infraestructura, como por ejemplo, rehacer a nuevo el centro de día de adultos mayores de la ciudad de Río Grande; o en el caso de la ciudad de Ushuaia una construcción integral en las dependencias de atención de políticas de género con lo que ha quedado de la estructura anterior.
¿El gobierno provincial sigue apostando fuertemente a la infraestructura sanitaria?
Sí, porque es uno de los ejes troncales del Gobierno de la Provincia. Hace poco hemos inaugurado el Centro de Rehabilitación, el cual es único en la Patagonia. Se trata de una infraestructura que merece un capítulo aparte; si bien se ha construido en un esfuerzo compartido con el acompañamiento que teníamos del gobierno anterior, y que nos permitió en ese 30 por ciento inicial de obra, complementar con el gran aporte del Gobierno de la Provincia, pudimos construir una infraestructura de 4.500 metros cuadrados.
Este centro permite la atención integral a las personas con discapacidad en la salud y en lo social, ya que en esa misma instalación tenemos la posibilidad de la atención externa, ambulatoria, de consultorio y de gimnasio de rehabilitación, tanto como la atención de internación y de hospital de día para los tratamientos intensivos. Además, hay un piso que tiene todo lo que corresponde con el área administrativa, el transporte adaptado, el banco de préstamo de ortopedia, el departamento de prótesis y ortesis, la atención para el trabajo con adultos mayores la estimulación, neurocognitiva, estimulación motriz, pileta terapéutica la oportunidad de tratamientos de rehabilitación y la alternativa también de acciones preventivas en salud para factores de riesgo.
Entonces, en esta misma línea, si bien hemos cerrado el trabajo en la obra en este espacio, tenemos un gran desafío por delante que es avanzar, y estamos en ejecución de la ampliación del Hospital Regional de la ciudad de Ushuaia con 11.500 nuevos metros cuadrados de construcción, el cual nos va a permitir multiplicar exponencialmente la infraestructura en internación en consultorios en área técnica, nuevas áreas de lavado, esterilización y todo lo que son los servicios auxiliares estacionamientos. Es una gran infraestructura en cuatro plantas que va a posibilitar, en un año más, multiplicar las instalaciones y tener la infraestructura necesaria con una proyección de crecimiento para los próximos 40 años en la provincia.
En la ciudad de Tolhuin, el año pasado finalizamos el Centro Modular de Salud, que ha sido el salto exponencial en el acceso a la salud de la tercera ciudad de la provincia y contribuye a que de esta manera las personas disminuyan las migraciones que había para poder tener la atención de especialidad médica, consulta de niño sano o de control de salud. Es decir, una gran cantidad de servicios que se abrieron por primera vez en la ciudad de Tolhuin.
En Río Grande estamos avanzando en el Plan Integral de la infraestructura sanitaria, que nos permita reformular los servicios en ese hospital y hacer crecer en espacios de nuevos quirófanos, además reformamos las zonas de internación maternidad clínica médica, cirugía y salud mental. El objetivo de estas obras mencionadas es que, de esta manera, tengamos también una infraestructura acorde al crecimiento de la ciudad, aparte de generar una nueva área que tiene que ver con el hospital de día.
Ya finalizamos la primera etapa, que fue la guardia del hospital, la división de la Guardia Pediátrica y de Adultos, con espacios de shock room, de nuevas salas para observación y que permita un trabajo con mejor infraestructura para el desempeño de los profesionales de la salud.
¿Cuáles son las principales obras educativas que se ejecutan?
En lo que respecta a la apuesta en la infraestructura educativa, estamos avanzando en la construcción de una escuela con fondos nacionales, la infraestructura de las dependencias públicas de poder mejorar los espacios de trabajo para optimizar el servicio a los vecinos, y estamos trabajando en la accesibilidad a los edificios públicos para dar las oportunidades en el trabajo autónomo. Estos son compromisos de gestión importantes.
Tras el traspaso del Gobierno nacional de obra pública a la provincia, ¿qué obras va a poder continuar TDF con fondos propios?
Hemos firmado con el gobierno nacional el convenio, con algunas particularidades y ajustes que propusimos desde la provincia al modelo original que planteaba el gobierno de la Nación. En este sentido, hay un compromiso asumido de financiar un paquete de obras que tienen que ver con lo vial; con la infraestructura troncal del Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (ENOHSA) para beneficiar el agua potable para la ciudad y un tratamiento de efluentes para Ushuaia, Tolhuin y Río Grande. Todas estas obras esperamos poder activarlas en muy poco tiempo más.
Hoy estamos destrabando las cuestiones administrativas que tienen que ver con los pagos pendientes y la redeterminaciones de precios, para poder tener precio nuevo en cada una de estas obras, y que, entendemos, que es una acción que tiene que darse en un carácter de prioridad para que sea una realidad la apertura de obras de este tipo de gran envergadura. Es por esto que tenemos un trabajo contrarreloj para poder subsanar las dificultades que trae el parate de 9 meses de las obras en un contexto de asimetría económica que se dio hacia fines del año pasado y principios de este año, que hacen imprescindible poder hacer todo este ajuste previo al inicio. Si no es así, las obras no pueden sostenerse desde lo económico, más allá de que es imprescindible reactivarlas con una regularidad de pago, y este es un requerimiento también de las empresas.
¿Qué sucederá con las obras relacionadas con nuevas soluciones habitacionales a los fueguinos?
Entendemos que dentro de dicho paquete deben reiniciarse las obras que tienen que ver con la vivienda. Conforme a los acuerdos firmados en la Casa Rosada, estamos en este trabajo técnico-administrativo para ganar tiempo y poder llegar a cubrir esas cuestiones, esto es lo pendiente para poder verdaderamente reiniciar las obras. Hoy estamos en un trabajo de ida y vuelta con el Gobierno Nacional para que verdaderamente podamos avanzar y llegar a la instancia de pago.
Si bien en distintos encuentros con funcionarios y otras provincias, planteamos los estados de situación de la obra pública en la Argentina, y en esta sucesión de reuniones hemos ido teniendo un panorama de la cantidad de obras que tenía la Argentina hacía fines del 2023, pudimos ver cuál fue el recorte y la priorización que hizo el gobierno nacional. A partir de ahí fuimos avanzando en el trabajo para llegar al esquema de cuáles son las obras que asumen la provincia como responsabilidad para continuar. Por eso hablo de este acento que pone Tierra del Fuego en poder acompañar las políticas de la infancia, las políticas de género y también en esto construir la nueva comisaría de género de la ciudad de Río Grande, que es una de las obras que ha aceptado la provincia.
Además, queremos poder avanzar con obras que comprometió el financiamiento el gobierno nacional y que de esta manera tengamos un plan con mejor dimensión en la cantidad de obras, que lo que ha sido la primera parte del año.
¿Cree que el acuerdo con el Gobierno Nacional traerá aparejado también el aumento de la mano de obra en la construcción para los fueguinos?
En Tierra del Fuego necesitamos retomar el volumen de obra pública y la cantidad de obras que teníamos en la provincia porque claramente la construcción es un gran movilizador de la economía.
El empleado de la construcción cobra su sueldo y lo gasta en el mercado local. Hay una movilización de la economía en el rubro cuando se reactiva la obra pública, y que no ha podido ser absorbida por la obra privada. Hoy tenemos todavía un gran nivel de desocupación en el sector de la construcción que están esperando ansiosos esta posibilidad de la reactivación, y que de esta manera vuelvan a trabajar las distintas familias profesionales. Esperamos que esta reactivación pueda darse muy pronto y que la próxima temporada sea promisoria en donde el trabajo en la construcción sea un eje estructural en la economía de Tierra del Fuego.