La Cámara Empresaria de Desarrolladores Urbanos de la República Argentina (CEDU) y la Asociación de Empresarios de la Vivienda de la República Argentina (AEV) y cámaras afines federales adhieren a la posición expresada por la Cámara Argentina de la Construcción y UOCRA respecto a que no deben detenerse las obras, ante las informaciones periodísticas que señalan la posible suspensión de la actividad de la construcción de obras privadas como medidas para evitar el incremento de casos de Covid-19 que se registra actualmente.
Al reactivarse las obras en 2020, las empresas adoptaron los protocolos necesarios para cumplir con todos los cuidados que el contexto de pandemia requiere para retornar al trabajo y desde entonces los han cumplido estrictamente. La experiencia vivida desde entonces demuestra que las obras no son fuente de contagio y por lo tanto no deberían ser detenidas.
Asimismo, hay que considerar que el personal empleado en las obras utiliza transporte privado provisto por las empresas y no hace uso del transporte público.
Es importante destacar también que las empresas realizan testeos continuos al personal para detectar casos positivos de Covid-19, contribuyendo así a liberar el sistema de salud.
“La actividad de la construcción tiene un rol central porque tiene muchas cosas a favor: tiene un efecto multiplicador. Cuando se mueve la construcción, se mueve la de cemento, la de ladrillos, la de madera. Es impresionante. Además, gran parte de todo eso no necesitamos importarlo. La construcción es el motor que va a encender la economía”, dijo el presidente Alberto Fernández el encabezar un acto en la planta de Loma Negra en Olavarría en noviembre de 2020.
El sector de la construcción es clave para reactivar la economía del país, en un contexto complejo y diverso. La construcción genera puestos de trabajo directos e indirectos de profesionales relacionados a la construcción y millones de metros cuadrados esperando por transformarse en viviendas para todos los argentinos.
Para que esto sea posible necesitamos que sigan activas las obras con todos los protocolos y medidas sanitarias adecuadas, como se viene haciendo. Debemos convivir con esta situación hasta lograr superarla, recorriendo este camino con responsabilidad, compromiso y trabajo como lo venimos haciendo. Aprendimos a extremar las medidas necesarias para poder llevar adelante las actividades, reduciendo al máximo los riesgos de contagio.
Superar esta situación depende de las empresas, los trabajadores, los ciudadanos y el Estado, actuando en conjunto, de forma colaborativa y responsable, y el sector de la construcción ha demostrado que cumplió con todo lo necesario para hacerlo.