¿Cómo se encuentran los recorridos de las líneas de transporte público de colectivos y la red de servicios en sus áreas centrales en las diferentes zonas de nuestro país?
Los recorridos de las líneas de transporte público colectivo de las ciudades de la República Argentina tienen, en la mayoría de los casos, un alto grado de cobertura territorial y una muy densa red de servicios en sus áreas centrales. Sus recorridos fueron establecidos a lo largo del tiempo sobre la base de la experiencia de los operadores del servicio, de los funcionarios municipales, a la solicitud de los vecinos, pero pocas veces a través de un estudio de demanda de transporte, por lo que la oferta del sistema podría no estar ajustada a las demandas y necesidades actuales y, por ende, los costos de producción y las tarifas del sistema no estarían optimizadas.
La mencionada cobertura territorial presenta ventajas y desventajas. La ventaja principal es la reducción de la caminata media de las personas usuarias hasta los puntos de ascenso a las unidades. Como desventaja, se puede considerar que mientras los recorridos producen varios inconvenientes, como son el aumento del kilometraje y el aumento de los tiempos de viaje producto de su tortuosidad, ambos podrían ser considerados innecesarios sin que ello signifique una baja en la calidad de la oferta.
La discusión sobre estos puntos es central. La prolongación de los recorridos aumenta los tiempos de viaje, lo que incentiva a derivar viajes hacia los modos privados, como automóviles y motos. En algunos casos, estos recorridos se realizan por arterias terciarias y no pavimentadas. El Índice Pasajero Kilómetro (IPK) en varios recorridos se encuentra por debajo de los 2 pasajeros por kilómetro, lo que obligaría a elevar la tarifa media del sistema a valores prácticamente imposibles de pagar por los usuarios del sistema, por lo que el subsidio colabora en disminuir estos valores.
Por otra parte, se incrementan los costos de producción y, por lo tanto, las tarifas, situación sumamente crítica en la coyuntura actual, donde, por un lado los empresarios “piden tarifa” y, por el otro, los gobiernos municipales, provinciales y nacional tratan, en la medida de lo posible, de desalentar estos incrementos.
La opinión pública va en la misma sintonía, alegando que es un “servicio público”, sin comprender los costos que conlleva su operación. De acuerdo con varios estudios llevados a cabo el costo del personal representa, según la coyuntura económica, alrededor del 50% de los costos de producción del sistema, entonces un aumento de los salarios de choferes y personal incide fuertemente en los costos del sistema y, por lo tanto, en la tarifa.
Como es sabido, el sistema de transporte público en la República Argentina está subsidiado desde hace más de dos décadas. Los subsidios dependen del Estado nacional, provincial o municipal, según los casos. Si no estuviera subsidiado el sistema, las tarifas que deberían pagar los usuarios harían imposible el viaje de muchos de ellos.
Ante este escenario es imprescindible analizar en detalle cada uno de los sistemas de transporte en las ciudades de Argentina, para estudiar su racionalidad y eficiencia, y así optimizar los recorridos y costos, utilizando herramientas que permitan gestionar y evaluar los diferentes parámetros que cumplen un rol determinante a la hora de la prestación, operación y utilización del servicio.
La introducción de herramientas de planificación permite analizar la demanda actual y potencial de los sistemas, a través de los orígenes y destinos de los viajes, estudiando la racionalidad de los recorridos de cada sistema, posibilitando evaluar indicadores ante la reestructuración de los recorridos, frecuencias, cantidad de unidades, para en el futuro implementar un sistema más eficiente y productivo.
En ese sentido, IRV se ha especializado en el desarrollo de estos estudios. Cuenta con los softwares PTV VISUM22 y PTV VISSIM22 de origen alemán. En particular el primero de ellos permite responder algunas preguntas que se formulan en la actualidad, y que sin emplear una herramienta y metodología de planificación no podrían ser contestadas. Las preguntas que un funcionario a cargo del sistema de transporte público se podría estar formulando serían algunas de las siguientes: ¿es la actual red de transporte de la ciudad bajo análisis la más efectiva?; ¿qué ocurrirá si se elimina algunas líneas?; ¿cómo deberían ser las frecuencias y el número de servicios diarios?; ¿cómo varía la tarifa en cada escenario analizado?; ¿y la flota de colectivos?; ¿cuál es la diferencia de cuadras caminadas en cada escenario?; ¿cómo varía el tiempo de viaje?; ¿cómo deberá crecer el sistema de transporte cuando la ciudad continúe con su crecimiento urbano y poblacional?; ¿cómo deberá crecer la ciudad de acuerdo con el sistema de transporte existente?
Contestadas estas preguntas, y analizados los resultados que tendrán en cuenta el nivel de servicio al usuario y del operador, por lo que, una vez seleccionado el escenario o alternativa óptima, se podrá planificar el sistema de transporte público de cada ciudad para la situación actual, y para el futuro cercano y lejano, y por ende, estimar los ahorros, el impacto a los usuarios y la tarifa de equilibrio del sistema.
En los últimos años, IRV ha realizado estudios para evaluar la racionalidad y eficiencia del sistema de transporte público en diferentes ciudades de Argentina, entre las cuales se destacan: Posadas, Bariloche, Mar del Plata, Trelew, Comodoro Rivadavia, Puerto Madryn, Viedma, así como las regiones metropolitanas de Buenos Aires, Tucumán, de la Confluencia (Neuquén – Río Negro) y, en el último año, en el Área Metropolitana de Salta (AMS).
Tomando este último trabajo como ejemplo, se destaca la institucionalidad que presenta el AMS, donde existe un organismo que tiene a su cargo potestades de planificación, organización, actuación, regulación, fiscalización y control del transporte (Autoridad Metropolitana de Transporte – AMT) y una empresa encargada de la prestación de los servicios de transporte público (Sociedad Anónima de Transporte Automotor – SAETA), que configuran un hito en materia de transporte público no solo a nivel local, sino también a nivel nacional siendo pioneros en el abordaje metropolitano del transporte.
Esto no solo demuestra un avance en materia legal e institucional, también se refleja en el servicio de transporte público, ya que desde el momento de su creación la calidad del servicio, la cantidad de pasajeros transportados y la oferta brindada aumentan año a año convirtiéndose en el modo más utilizado para desplazarse por los salteños. No obstante ello, IRV colaboró para evaluar la racionalidad y eficiencia de las redes, y evaluar posibles modificaciones que permitan operar una red más optimizada.
Para ello IRV, trabajó en el análisis de la demanda del sistema, la cual se obtuvo a partir de las transacciones de usuarios del servicio de transporte de abril de 2022 (SAETA) y que permitió alimentar la modelización de un escenario actual, obtener indicadores de funcionamiento, evaluar el desempeño del sistema y proponer mejoras para evaluar escenarios futuros. Los resultados permitieron identificar áreas de deficiencia o bajo desempeño del sistema, principalmente.
Las propuestas desarrolladas para la optimización del sistema de transporte público del AMS contemplaron el rediseño y redimensionamiento de líneas troncales estructurantes del sistema, la reestructuración de líneas metropolitanas y creación de líneas interbarriales o locales complementarias, y la adecuación de recorridos de líneas urbanas. A partir de estas propuestas se desarrollaron dos escenarios futuros de simulación que demuestran que el sistema de transporte actual del AMS puede funcionar con mayor eficiencia respondiendo a las necesidades de demanda de la población, garantizando la cobertura del sistema y buen nivel de accesibilidad y movilidad a aquellas localidades y barrios con baja demanda.
En ambos escenarios se registran diferencias en el desempeño del sistema con respecto al escenario actual, especialmente pudiendo mejorar los índices de pasajeros kilómetro del sistema y reduciendo la flota en hora pico y costos asociados a la operación de este. Asimismo, para la implementación del nuevo sistema se desarrollaron una serie de ejes de trabajo en relación con la jerarquización de la infraestructura de circulación, la accesibilidad general al sistema y las opciones de operación del servicio, tal que permitan completar el proceso de planificación a través de la definición de un plan de acción que contemple diferentes líneas para alcanzar un servicio más eficiente y atractivo para los diferentes actores.
Como corolario, se destaca que incentivar el uso del transporte público debería ser parte central de la agenda pública, teniendo como foco que, cuanto mayor sea la cantidad de pasajeros transportados, a igual costo por vehículo-km, menor será la tarifa resultante. El camino contrario implicaría el cambio modal a sistemas de transporte particulares como las motos y el automóvil. De ocurrir lo anterior, es posible que en muchas ciudades del país el sistema de transporte público tengo sus días contados.
Por ING. GUILLERMO YAMPOLSKY