Desde hace algunos años, Jujuy comenzó a implementar el proyecto de pueblos solares, una política de integración que permite desde la soberanía energética hasta generar igualdad de condiciones.
En la primera etapa fueron seleccionados nueve pueblos para esta intervención en materia de energías renovables que están ubicados dentro del Sistema Aislado, que los abastece de servicio de energía por medio de la combustión de material fósil (gasoil) y les posibilita la provisión de energía limpia, segura y de calidad las 24 horas.
“La provincia incentiva las energías renovables. Incluso, nuestro slogan es ‘Jujuy, energía viva y provincia verde’. Estamos fomentando, junto con el Gobierno provincial, todo lo que tenga que ver con este tipo de energía que generan obras de infraestructura y miles de fuentes de trabajo”, afirmó el ministro de Infraestructura, Servicios Públicos, Tierra y Vivienda de la provincia, Carlos Stanic.
PRINCIPALES BENEFICIOS
Ahora bien, ¿qué importancia tiene la obra de Olaroz Chico? Cauchari es la planta fotovoltaica más grande de Latinoamérica y una de las más grandes del mundo. Dentro de ese concepto están los llamados “pueblos solares”, es decir, las localidades que no poseen energía estable, que se encuentran aisladas, con solamente unas ocho horas de energía con grupos electrógenos.
“A todas esas ciudades se las irá migrando a energía fotovoltaica, la primera fue Olaroz Chico. Este paraje contaba con energía a través de un grupo electrógeno que se apagaba a la noche porque, por el ruido que generaba, la gente no podía dormir. Y ahora tienen energía fotovoltaica con acumulación, con baterías de litio”, sostuvo Stanic.
Este tipo de energía cortar la emisión de gases de carbono porque los grupos electrógenos que se usan son a gasoil, con energía renovable durante las 24 horas. El caso Olaroz, “se diseñó en función de la demanda que había y estimó un crecimiento del 10%. Sucedió que, al poseer energía permanente y al tener dos empresas mineras trabajando con el litio y que empezó a demandar fuentes laborales, a los pocos meses quedó chica. En un año, en la localidad creció un 100% la demanda y, entonces, hubo que repotenciarla”, explicó el funcionario.
Eso significó hacer un trabajo para ampliar la capacidad de acumulación y se pusieron más baterías de litio. “Poder aumentar su capacidad energética produjo un crecimiento en la actividad del pueblo y permitió que se instalaran nuevos locales comerciales, talleres metalúrgicos y otros que posibilitaron un increíble desarrollo”, detalló el ministro.
¿Cómo manejan el sistema de energía en Jujuy?
Existen sistemas de energía distintos: el interconectado nacional que está en todo el país y que llega solamente hasta Humahuaca; al norte de esa localidad se encuentra el denominado Sistema Disperso, allí inauguramos la nueva central fotovoltaica y el sistema aislado de la Puna, donde les damos energía a través de paneles solares a las casas de las pequeñas localidades. En el caso de los pueblos solares eran lugares que tenían generación aislada, no están en el sistema interconectado ni en el disperso, y se encuentran con un sistema aislado de generación propia. En Jujuy sigue habiendo muchos lugares así.
Afirman que la provincia está en la agenda del mundo para esta clase de obras. ¿Hay empresas extranjeras interesadas en este tipo de inversiones?
Tenemos un plan de 96 megavatios de generación solar dispersa con estos pueblos solares y, a su vez, con un sistema de generación para entregarle a la empresa distribuidora de energía. Esto está en el marco de un plan de Energía Limpia, por el cual nos venderíamos a nosotros mismos, por decirlo así, energía fotovoltaica.
¿Podría darnos un ejemplo?
El gerente general de la empresa distribuidora de energía de Jujuy ya estuvo en conversaciones con empresas de Estados Unidos, Alemania e Italia, que se interesaron por esta novedosa experiencia. La conjunción de varias tecnologías para la generación de energía es lo novedoso, somos la provincia que posee la mayor generación de energía renovable fotovoltaica del país.
Estas obras de infraestructura que se hacen en los pueblos, ¿se traducen en fuentes de trabajo?
Sí, totalmente. Para algunas comunidades, como las aborígenes, esto no solo les ha dado fuentes de trabajo, también la experiencia del aprendizaje de algo a lo que no estaban acostumbrados hacer. Necesitamos trabajadores de todo tipo, por ejemplo, gente que limpie esos paneles solares. En el caso de Cauchari, se requirió un millón de paneles, y esas obras significan que, luego de realizarlas, se van a generar muchas opciones laborales. Pero lo más significativo es lo que remarcaba en el caso de Olaroz, que al tener energía se producirán nuevas fuentes de trabajo en otros rubros no necesariamente ligados a ella, sino al crecimiento de los pueblos. Con la posibilidad de acceso a la energía crece la construcción, el empleo y los pueblos.
Al tener este tipo de energía sustentable, ¿la compañía es elegible para futuros créditos con bono verde?
Claro, por ejemplo, Cauchari, que es una empresa estatal propia y que nos permite vender energía desde Jujuy, se subvencionó parte con créditos chinos y parte con un bono verde que sacó la provincia. Ya tenemos propuestas de empresas nacionales y extranjeras que nos contactaron con la intención de invertir en un parque de 25 megas acá.
¿Cuáles otras obras tienen licitadas y cuáles ya comenzaron?
Inauguramos un complejo donde se va a ubicar el Ministerio de Educación y es el primer gran edificio público para administración pública que se hace en 50 años. Otra obra importante en la provincia, que se licitó y se adjudicó, es una cárcel grande, ya que la actual no solo nos había quedado chica, sino que se sitúa en pleno centro de la ciudad. También llevamos adelante la obra del Cabildo Histórico, que será un gran museo en donde contaremos la historia de Jujuy, con plaza seca, con el archivo histórico de la provincia, una pinacoteca… Se trata de una obra muy importante de más de $1000 millones.
Por otro lado, ¿están construyendo escuelas?
Es el gran proyecto que hay en la provincia. Las obras se abonan con créditos de la Corporación Andina de Fomento (CAF) y el crédito lo paga la renta de Cauchari. Es decir, el parque solar que hoy vende energía al estado nacional se hará cargo de las obras de la construcción de establecimientos educativos. Pretendemos construir 258 nuevos y vamos a refaccionar 700 restantes. Es un crédito de USD 300 millones que incluye la instalación de fibra óptica para que todas las escuelas de la provincia estén comunicadas. Pondremos cerca de 2000 kilómetros de fibra óptica y radioenlace, lo que generará unos 10.000 puestos de trabajo.