Con el desafío de planificar y ejecutar obras troncales de expansión en entornos urbanos altamente complejos y dinámicos.
El acelerado crecimiento de las zonas urbanas durante las últimas décadas, acompañado de una significativa ampliación territorial, ha puesto en evidencia las dificultades para avanzar en el logro de las metas relativas a la universalización de los servicios de agua potable y saneamiento en nuestro país.Por su parte, el aumento de la población urbana trae consigo la consolidación y mayor número de asentamientos precarios y viviendas que exigen un tratamiento integral para la provisión de servicios domiciliarios. Las áreas con altos niveles de marginalidad y pobreza, donde se desarrollaron de manera desordenada asentamientos precarios, en muchos casos en terrenos no aptos, suelen verse afectadas por la falta de cobertura o por problemas de calidad en referencia a los servicios de provisión de agua potable y recolección de aguas residuales.
A este aspecto se suma la asimetría y atraso significativo que existe en términos de cobertura de los servicios, destacando que este déficit se localiza en gran medida en las áreas de menores ingresos. De esta manera, parte de la población debe enfrentar una creciente demanda insatisfecha.El incremento demográfico combinado con la concentración poblacional en áreas urbanas constituye uno de los grandes desafíos que enfrentan los operadores debido a la necesidad de ampliar la infraestructura, al mismo tiempo de mejorar la calidad y la eficiencia del servicio.
La escasez de recursos hídricos de calidad en un contexto caracterizado por una urbanización acelerada conlleva otro desafío que debe ser considerado con vistas a la sustentabilidad de la prestación, dado que para abastecer esta demanda creciente resulta necesario, además, mejorar la eficiencia operativa, disminuir las pérdidas físicas y comerciales, concientizar a la población y aplicar esquemas tarifarios orientados al uso racional del servicio.
Por su parte, para mitigar los problemas ambientales no solo deben ampliarse las coberturas, sino que también resulta fundamentallograr el tratamiento de las aguas residuales para reducir la contaminación de los cuerpos receptores y no afectar las potenciales fuentes de abastecimiento, así como mantener el equilibrio para prevenir su sobreexplotación.
En este sentido, vale destacar la agenda de desarrollo sostenible propuesta por la Organización de Naciones Unidas para el año 2030. En particular, el Objetivo 6 trata sobre el agua limpia y saneamiento, en línea con promover la disponibilidad de agua, su gestión sostenible y la disposición segura de efluentes para toda la población. El cumplimiento de estas metas reviste un compromiso muy exigente para diversas especialidadesde la ingeniería y requiereuna estrecha interacción de diversos actores, destacando el rol de los diseñadores, las empresas constructoras ylos operadores del servicio, así como la participación de distintos organismos bilaterales y multilaterales que permitenla financiación de las obras.
En este contexto, los estudios hidráulicos y de planificación deben abordar la problemática de abastecimiento de agua potable y saneamiento con una mirada enfocada en la previsión y gestión integrada de los recursos hídricos. Sin embargo, el marco institucional resulta complejo, existiendo superposición de funciones y, muchas veces, sin poder identificar un enfoque homogéneo entre y dentro de los distintos prestadores del servicio. En la mayoría de los países, la gestión de los recursos recae en una autoridad de nivel superior, mientras que la prestación de los servicios se encuentra descentralizada y, en algunos casos, atomizada, con escasa coordinación interinstitucional.
A este conjunto de desafíos se le agrega un cambio en el paradigma vigente: acceso a servicios de saneamiento que solo prioriza la construcción de infraestructurahacia un enfoque que promueva soluciones de carácter eficiente y adecuadas a los distintos contextos geográficos y sociales de las comunidades, mayor consciencia sobre los costos de operación y mantenimiento de las obras y el manejo integral de las cuencas urbanas.
Ante este escenario, resulta imperante dar lugar al uso de nuevas tecnologías e innovación en el sector de agua y saneamiento. El desarrollo de modelos hidráulicos avanzados es una herramienta esencial para la planificación, diseño, operación y optimización de la infraestructura proyectada. La fase de análisis y evaluación de alternativas a través de estos instrumentos resulta primordial y debe responder a un cuidadoso análisis de las distintas variables técnicas, constructivas y ambientales intervinientes. Al mismo tiempo, las obras proyectadas tienen que integrarse en forma armónica con los sistemas que se encuentran en actual funcionamiento, como también brindar previsión y flexibilidad para intervenciones futuras. La seguridad, durabilidad y la robustez en la operación y mantenimiento de los sistemas debe ser considerada como base desde las primeras etapas de diseño.
Por su parte, los sistemas de información geográfica y la aplicación de metodologías BIM (BuildingInformationModels) han cobrado un rol importante en la generación y administración organizada de datos espaciales, fundamental para el diseño de sistemas que se implantan en áreas urbanas densamente intervenidas por otros servicios cuya traza interfiere tanto a nivel superficial como subterráneo.
Por último, la medición continua e inteligentesobre el desempeño de la infraestructura existente resulta importante para lograr robustecer los criterios de diseño y condiciones de borde que se imparten hacia nuevos proyectos,eincluso, que permitan la readecuación de sistemas en actual operación con el objeto de lograr una optimización del servicio. En este sentido, esvital fomentar la aplicación de programas de control y supervisión en la adquisición de datoscon capacidad de automatización,a los fines de evitar lecturas manuales de los distintos instrumentos de medición, promoviendo así la calidad y continuidad de los registros.
Dentro de las distintas obras de saneamiento que se encuentran en desarrollo en nuestro país vale destacar el caso del Sistema Riachuelo, una megaobra de infraestructura que permitirá dar solución integral a las limitaciones en la capacidad de transporte de los desagües cloacales del actual Sistema Troncal de Saneamiento en el área metropolitana de Buenos Aires, mejorando la prestación del servicio a más de 4,3 millones de habitantes y posibilitando en un futuro la incorporación de 1,5 millones de personas al servicio en el sudoeste del conurbano bonaerense.
Al ser la primera gran ampliación del sistema troncal de cloacas que se realiza en el AMBA en más de 70 años, esta reviste una importancia significativa para garantizar la sostenibilidad del servicio de recolección, transporte y disposición segura de los efluentes cloacales.Asimismo, en forma complementaria se encuentra en desarrollo la ejecución de un nuevo emisario y estación de bombeo dentro del Sistema Berazategui, cuya cuenca recibe los aportes de más de 7,3 millones de habitantes, asegurando la disposición adecuada de los efluentes pretratados sobre el Río de la Plata y mejorando así la calidad ambiental del cuerpo receptor.
Por otra parte, eldenominado Sistema Agua Sur es un proyecto comprensivo de diez grandes obras que promoverán el abastecimiento de agua potable en los partidos de la zona sur del conurbano bonaerense beneficiando a más de 2,5 millones de habitantes. Entre ellas se incluye la ejecución de obras de captación, producción, transporte y distribución que reforzarán los sistemas de abastecimiento que actualmente se encuentran en funcionamiento.
Desde Serman& Asociados se han desarrollado una gran cantidad de estudios básicos para la licitación de importantes proyectos de infraestructura de saneamiento en el país. Asimismo, se ha participado en la ejecución de megaobras troncales, brindando soporte tanto en etapa de ingeniería de detallecomo en la inspecciónde las obras. Entre los aspectos clave para eldesarrollo de estos proyectos vale destacar la planificación e integración de las tareas de campo y gabinete, la interaccióninterdisciplinaria de los profesionales intervinientes y el control de calidad sobre la documentación elaborada, de manera tal de cumplimentar los distintos requerimientos técnicos y programáticos de las obras.
Por ING. NICOLÁS BUONO – (EL AUTOR ESGERENTE DE INGENIERÍA HIDRÁULICA EN SERMAN & ASOC.)