Finlay, una marca del Grupo Terex que en nuestro país representa Repas, ha lanzado la nueva generación de dos de sus máquinas más versátiles y probadas: las cribas inclinadas Finlay 693 y Finlay 694.
Diseñadas para ofrecer rendimiento, eficiencia y adaptabilidad, estas cribas están diseñadas para manejar las aplicaciones más exigentes en canteras, minería, arena y grava, carbón, astillas de madera y tierra vegetal. En cualquier caso, responden con un alto rendimiento, un cribado de precisión y una mayor eficiencia en la obra: las 693 y 694 están diseñadas para afrontar el máximo desafío.
Entre las principales características de los nuevos equipos, se destaca:
– Potente rendimiento de cribado: Las cajas de cribado de alta energía ofrecen una separación uniforme del material, incluso en tamaños pequeños.
– Opciones de alimentación flexibles: La tecnología híbrida permite el funcionamiento con el motor integrado o una fuente de alimentación externa.
– Menores costos operativos: El grupo electrógeno está optimizado para velocidades de motor más bajas, lo que mejora la eficiencia del combustible sin comprometer la potencia.
– Configuración y mantenimiento simplificados: Las pasarelas manuales extra anchas y los mecanismos de plegado mejoran el acceso y reducen el tiempo de configuración.
– Telemática T-Link: Para mantenerse conectado con datos y diagnósticos de las máquinas en tiempo real.
LAS DIFERENCIAS
Por definición, en minería, zaranda y criba se usan indistintamente para referirse al mismo equipo de separación, una maquinaria con mallas o tamices que vibra para clasificar materiales según su tamaño, reteniendo las partículas gruesas y dejando pasar las finas a través de la trama la malla; mientras un motor vibratorio o excitador genera un movimiento de vibración y unos componentes mecánicos (cojinetes) permiten el movimiento vibratorio de las bandejas que, en este caso, se presentan inclinadas. Por fin, el material que se carga en una tolva por un extremo, se apila ya clasificado al final de proceso, gracias a unas cintas transportadoras.
Particularmente, la criba Finlay 694 se configura con una nueva caja de cribado de tres pisos: dos pisos de 6,1 mts x 1,53 mts y un piso inferior de 5,55 mts x 1,53 mts, lo que proporciona un rendimiento excepcional. Fue diseñada con un enfoque en la eficiencia, la versatilidad y la reducción de costos operativos y se emplea preferentemente con materiales limpios. Esta está disponible con un sistema de alimentación híbrido y una caja de cribado con enjuagadora (rinser) de alto volumen opcional, para aplicaciones de cribado en húmedo, lo que aumenta aún más su funcionalidad para ciertos materiales y procesos y concierte a esta criba en una de las máquinas más adaptables de su clase.
Por su lado, la criba Finlay 693 (foto) tiene solo dos pisos, una configuración de doble cubierta con una amplia plataforma superior de 6,1 mts x 1,53 mts y la plataforma inferior de 5,55 mts x 1,53 mts, que permiten manipular materiales duros y pegajosos con facilidad. Así, la zaranda 693 es igualmente ideal para soluciones de cribado móviles y operaciones de alta producción, proporcionando una separación uniforme del material donde sea necesario.
Por lo demás, viene también equipada con una gran tolva y su alimentador de banda de velocidad variable, para garantizar un flujo constante de material, mientras que las múltiples opciones de rejilla ofrecen flexibilidad para adaptarse a una amplia gama de requisitos de obra; mientras el alimentador de banda de velocidad variable y las configuraciones de rejilla opcionales proporcionan un funcionamiento uniforme y flexible.



