El sector minero aportó US$ 53.813 millones a la Argentina entre enero de 2003 y octubre de 2021, con lo que se convirtió en la única industria que tuvo saldo positivo en dólares todos los meses durante 17 años, de acuerdo con un análisis cambiario realizado sobre el citado período en base a los balances del Banco Central.
El informe -elaborado por la Secretaría de Minería- destacó que los ingresos de divisas por inversión extranjera directa (IED) en el sector enero de 2003 y octubre de 2021 explicaron el 20,16% del total, equivalente a uno de cada cinco dólares, por un monto de US$ 7.732 millones.
La razón del estudio se explica en que «dada la escasez de las reservas internacionales en relación con las obligaciones de deuda, la elasticidad de las importaciones frente al crecimiento del producto y la demanda de dólares por parte de personas jurídicas y humanas para atesoramiento, los aportes que realiza la minería en materia de divisas son necesarios».
En este sentido, la excepcionalidad de su desempeño en el balance cambiario posiciona al sector minero como «un agente central en cualquier estrategia de desarrollo económico nacional».
En el marco de este análisis, se advirtió en el comercio de bienes y servicios de la economía en general un superávit sostenido en el tiempo, comandado principalmente por el sector agropecuario, la agroindustria y la minería.
Mientras que el comercio de servicios, la remisión de utilidades y dividendos, los pagos de interés y el atesoramiento son los principales factores que explican la disminución de las reservas internacionales, reseñó el documento de trabajo.
Según consta en el “Informe de la Evolución del Mercado de Cambios y Balance Cambiario” de octubre de 2021, excluyendo oleaginosas y cereales, la minería fue el cuarto sector en aportar más divisas en dicho año.
Así, formó parte del grupo de sectores que explican el 69% de los ingresos de divisas en ese mes, junto con alimentos, bebidas y tabaco; industria automotriz; petróleo; e industria química, caucho y plástico.
El documento resaltó que «la minería demuestra ser un sector que a lo largo del tiempo aporta sistemáticamente dólares a la economía nacional. En todos los meses durante casi dos décadas ha sido superavitaria en el resultado de su balance cambiario».
En el período analizado, el sector minero aportó US$ 53.813 millones netos, una cifra que se encuentra en fuerte contraste con el resultado final del balance cambiario consolidado del período, con un déficit de US$ 15.525 millones.
«De no contar con el sector minero, el déficit hubiese sido un 346,62% mayor», destacó el informe de la secretaría.
En cuanto a los ingresos de divisas por IED de la minería representaron el 20,16% del total (uno de cada cinco dólares) y equivalen a US$ 7.732 millones.
El sector supera en un 17,47% el resultado financiero agregado de la economía, lo que implica que los ingresos de esta cuenta del sector minero sirven para financiar los déficit generados en las cuentas de los otros sectores.
«En un contexto de restricción por la balanza de pagos como el que caracteriza a Argentina, la minería se posiciona como un actor necesario para mejorar el desempeño macroeconómico nacional», se destacó en el trabajo.
Una parte de la variación en los montos del resultado cambiario de la minería responde a los cambios en los precios internacionales de los metales, ya que desde inicios de 2003 hasta inicios de 2013 los precios tuvieron variaciones interanuales positivas, con una caída durante la crisis financiera internacional de 2008/2009.
Por otro lado, entre 2013 y 2017 los precios internacionales cayeron respecto del año previo y a principios de 2020, con el shock del coronavirus, tuvieron una variación positiva sin precedentes que se prolonga hasta hoy.
El balance cambiario del sector, entonces, muestra una tendencia creciente entre 2005 y 2013, con una caída en su resultado hasta 2015 y, finalmente, un estancamiento entre 2015-2021.
Sin embargo, la puesta en marcha de nuevos anuncios de inversión y la realización de nuevos proyectos -como Josemaría, Taca Taca y Pachón- deberían otorgarle a la serie, en el mediano plazo, un desempeño más similar al observado en la primera década del siglo actual.
«Esto abre un escenario positivo para Argentina debido a su potencial geológico y a la sensibilidad de las inversiones mineras frente a las variaciones de los precios internacionales», sostuvo el informe.
También se señaló el impacto indirecto de la actividad minera en la demanda de divisas de otros sectores de la economía que utilizan insumos mineros.
«A los saldos positivos generados directamente por el sector -se explicó- se le suman los beneficios indirectos que se desprenden de la compra nacional de insumos mineros por parte de otras actividades industriales».
La minería es un sector que se mantiene en los valores promedio del total de la economía en cuanto a la participación de las importaciones en las ventas, con un 7,24%».
Esto significa que, «del total de las ventas de la minería, la proporción de importaciones no es significativa, sino que está por debajo del promedio del resto de los sectores de la economía (7,58%), y más de la mitad de estas importaciones son maquinarias y equipos, químicos y plásticos».
Por último, el trabajo destacó que «en el período analizado, el ingreso de divisas por este concepto fue de US$ 7.732 millones, lo que representa el 14,4% del resultado total final cambiario minero pero equivale al 20,16% del resultado de inversión de todos los sectores consolidados para el período. En otras palabras, la minería representó uno de cada cinco dólares de IED».