Además de ser una materia prima esencial para la elaboración de revoques y revestimientos y emplearse como áridos en tareas de rellenos y cimentaciones, para la industria de la construcción, la arena resulta ser uno de los componentes básicos para la fabricación de hormigón: “Es un mercado que demanda valor agregado y, por ello, en Silos Areneros Buenos Aires creamos una División Hormigones, con el objetivo de abastecer a las hormigoneras con el producto de calidad que demandan”, explicó el director ejecutivo de SILOS ARENEROS BUENOS AIRES S.A.C., Jorge Arosa.
Con casi 70 años de experiencia en la extracción de todo tipo de áridos por medios navegatorios, hoy Silos Areneros Buenos Aires comercializa unas 180.000 toneladas mensuales de arena de río: cerca del 40% de la producción se despacha para la industria del hormigón elaborado y, “pese a la actual baja tracción de la demanda de la obra pública, seguimos invirtiendo y, por ejemplo, incorporamos el barco arenero más grande del país”, dice Arosa.
Egresado de la Escuela Naval Militar y expresidente del astillero Tandanor (Talleres Navales Dársena Norte), Arosa se declara marino “porque traer arena al puerto de Buenos Aires demanda un ciclo de no menos de 48 horas y la mayor parte del tiempo se está embarcado, porque cuanto más lejos se busca, el producto será de mejor calidad”.
¿De dónde proviene la arena que se consume en el AMBA y quién explora el banco?
Por costos y accesibilidad, toda la arena que se consume en la Ciudad de Buenos Aires y los alrededores proviene del Río de la Plata y el Paraná. En tanto que, de acuerdo con la habilidad de la tripulación del barco, especialmente del baqueano y el capitán, se exploran las áreas autorizadas por la Subsecretaría de Vías Navegables (porque no se puede extraer arena de cualquier parte de la hidrovía) y después de hacer varios viajes, con el tiempo, la empresa va registrando distintos puntos de esos ríos que presentan distintas granulometrías y tipos de arenas, de acuerdo con las pruebas hechas. Por fin, ante el requerimiento del cliente, los bancos serán explotados con distintas tecnologías.
¿Cómo se hace la extracción?
En pocas palabras, la operación se hace a través de barcos draga, con bombas de succión y caños que aspiran el banco del lecho arenoso del río. Después, en tierra, el producto que va a las hormigoneras se despacha en húmedo mientras que para otras industrias puede lavarse, secarse y clasificarse, de acuerdo con las especificaciones requeridas.
El cliente, ¿cómo cotiza la arena?
Considerando su destino final, al hacer un pedido de cotización o despacho, la arena se pide a partir de una granulometría (por ejemplo: de 1,6 a 1,8) y la cantidad de toneladas necesarias. Luego, la distribución podemos hacerla con camiones propios o los clientes pueden acercarse a retirar su pedido.
¿Las empresas areneras se integran con el sindicato marítimo, no son trabajadores mineros?
Las formas de organización de las empresas del sector son tradicionales y hoy, nuestras tripulaciones se integran con cinco sindicatos, no obstante que, ciertamente, las areneras pagamos por Guías Mineras, tanto los barcos como los camiones… En lo particular, creo que la Argentina podría tener un sindicato de areneros. Pero, como sea, lo más importante es llevar adelante un proceso de profesionalización de las compañías, como parte de la evolución de esta industria.
¿Podrá acelerarse ese proceso?
Sí. De hecho, la competencia llevó a Silos Areneros hacia la profesionalización de su plantilla, en un proceso que alcanza también a una fuerte inversión en equipamiento. En ese aspecto destacamos la puesta en función del buque Plata, con más de 100 metros de eslora y capacidad de transporte para 4500 toneladas. En la misma línea, la empresa está incorporando la tecnología necesaria para abastecer al mercado del hormigón con el valor agregado que esa industria necesita: no puede ser que las hormigoneras tengan que preparar sus propias mezclas.
¿Qué quiere decir?
La arena “pescada” en el río y comercializada sin más procesos es un negocio que tiene corta vida. Nosotros podemos vender un producto que presenta las especificaciones que el cliente requiere, en tanto que la tecnología incorporada nos permite adecuarnos a distintos emprendimientos. Es decir, según su granulometría, las arenas se clasifican en gruesas, medias y finas. Pero además, Silos Areneros Buenos Aires prepara mezclas de arenas a pedido de los clientes. Por ejemplo, para el hormigón de la obra de la Autopista Buenos Aires-La Plata se formuló una mezcla particular con las características específicas que el proyecto necesitaba. Desde entonces, esa fórmula fue estandarizada y se la conoce como arena Tipo Silos. Así, ya sea secándolos, clasificándolos o bien ofreciendo servicios diferenciales con mezclas especiales y la División Hormigones, la sustentabilidad de nuestra empresa se afirma tanto en la calidad profesional de su gente como en la posibilidad de incorporar el valor agregado al producto que el cliente necesita, para afrontar juntos y con óptimos resultados las obras de construcción que el país necesita.