A fines de los años 60, en la localidad cordobesa de Malagueño comenzó a formarse el open pit o tajo abierto del yacimiento de Canteras San Nicolás S.R.L, y como puede verse en la foto, desde un camino interno presenta un diseño aterrazado, hecho por banqueo mediante voladuras controladas y desarrollado con perforadores de barrenos verticales.
En el emprendimiento actualmente existen dos frentes de explotación del depósito, con bancos de entre 12 y 15 metros de altura. En tanto, la morfología del pozo excavado es subrectangular y se extiende en dirección N-S, con su eje mayor de unos 1.000 metros lineales, mientras que su eje menor presenta unos 350 metros en la sección más ancha.
Se trata de una geometría típica para una operación de minería a cielo abierto, que generalmente adopta la forma de pirámide invertida y facilita la construcción y el mantenimiento de los caminos destinados al acarreo del material fragmentado al tiempo que se ejecutan los diseños de las mallas de perforación, ampliando progresivamente el área de extracción tras quitarse la capa estéril.
En este sentido, Irma Pedrotti, socia-gerente titular de Canteras San Nicolás SRL, explicó: “La empresa ha desarrollado una segunda unidad de negocios: Prestación de Servicios Mineros, que realiza la perforación del frente de cantera de acuerdo al diseño de la voladura y luego, tercerizamos el servicio de la voladura a la firma Thor – Tecnología Minera” (ver aparte).
El proceso
Tras una importante inversión, a fines de la década de los 90 se calculó que esta cantera tendría una vida útil de 45 años, puesto que su producción rondaba las 148.000 toneladas mensuales de áridos procesados, mientras se comercializaba toda la gama de triturados pétreos que demanda la industria de la construcción. “Hacia el año 2000, ésta era la única cantera que producía la medida 0,20 que se emplea en bases y sub-bases estabilizadas. Era una granulometría que no existía en el mercado de la zona y desde esa época se cubre esta necesidad para los caminos terciarios”, recuerda Pedrotti.
Desde entonces, con una capacidad instalada para elaborar unas 4.000 toneladas por día de materiales aptos para su venta, con dos plantas procesadoras completas y en condiciones de trabajar, hoy este establecimiento tiene la capacidad técnica de triturar y clasificar las distintas variedades de roca metamórfica disponibles en Malagueño, un “gneis” compuesto por los mismos minerales que el granito: el cuarzo, el feldespato y la mica.
En su aplicación final y de acuerdo al tamaño, son productos especificados para diversos usos. Puede, por ejemplo, emplearse en hormigón elaborado, como balasto ferroviario, componer carpetas asfálticas y cimentaciones, integrar contrafuertes y escolleras o estructuras pretensadas.
No obstante, antes de triturar y clasificar por tamaño, el proceso industrial en San Nicolás comienza con la extracción de la materia prima virgen, mediante una perforación y voladura que está diseñada de manera conveniente para fragmentar la roca en el frente destapado de la cantera.
La operación
La perforación y voladura es una técnica aplicable a la extracción de rocas medias a duras o en aquellos terrenos en los que los medios mecánicos no son aplicables de una manera rentable.
Con la utilización de un equipo perforador, básicamente se trata de ejecutar un hoyo vertical -en este caso- donde posteriormente se colocarán explosivos que, mediante su detonación, transmiten la energía necesaria para la fragmentación del macizo rocoso a explotar. O sea que en esta operación intervienen dos tecnologías claramente diferenciadas y a la vez, correspondientes: el diseño y las perforaciones, y la ejecución de las voladuras. Así es que, como dicen los protagonistas de este sector: “Una buena perforación posibilitará una buena voladura y una mala perforación asegurará una mala voladura”. No obstante, gracias a instrumentos de última generación, se puede controlar dicha perforación, para que coincida con lo diseñado; “De esta manera se garantiza el éxito de la voladura, obteniendo fragmentos relativamente pequeños y la menor dispersión de piedras partidas, como para facilitar su posterior recogida”, señala Pedroti, concluyendo que por ello, “la perforación del frente de la cantera San Nicolás se realiza de acuerdo a un diseño previo a la voladura”.