A medida que avanza el año, los indicadores sectoriales confirman que, por un lado, el total de insumos enviados al mercado sigue siendo históricamente elevado, si bien resulta menor al registrado en igual mes de 2022, cuando se alcanzó un pico. Por otro lado, señalan la continuidad de la recuperación de la actividad de la construcción, traccionada principalmente por las obras medianas y grandes, que son las que generan la mayor proporción de los puestos de trabajo formales. En tanto, las perspectivas sectoriales a corto y mediano plazo continúan estando dominadas por la moderación.
En el cuarto mes del año el recientemente publicado Indicador Sintético de Actividad de la Construcción (ISAC) arrojó una recuperación de 3,4% mensual desestacionalizada, con lo cual alcanzó el nivel de despachos más elevado de los últimos nueve meses. Sin embargo, este indicador que releva los despachos de los trece grupos de productos más importantes para el amplio abanico de tipologías de obras que integran a la actividad de la construcción, mostró una caída de 0,6% interanual en abril (quinta caída en seis meses) y una contracción de 2,3% anual en el primer cuatrimestre del año.
El Índice Construya (IC), que considera solo las entregas de insumos del grupo para obras residenciales, viene anticipando una evolución similar en el tiempo a la del ISAC, si bien con una volatilidad mayor. En este sentido, en mayo registró una mejora de 1,1% mensual desestacionalizada, pero también el total entregado por estas empresas se mantuvo por debajo de los máximos registrados doce meses atrás (-9,2%). En tanto, si la comparación se realiza con julio del año pasado, cuando la crisis del Gobierno nacional, reflejada en la sucesión de tres ministros de economía, aceleró la búsqueda de cobertura del capital de trabajo y los despachos de insumos del grupo Construya alcanzaron un máximo histórico, la disminución fue de 14,8%.
El rebote corregido por estacionalidad que exhibió el ISAC entre marzo y abril de 2023 se explicó por mayores entregas en diez de los trece grupos de insumos que componen al indicador oficial. Se destacaron las subas puntuales en mosaicos graníticos y calcáreos (+25,2%), hormigón elaborado (+11,5%), pinturas (8,5%) y pisos y revestimientos cerámicos (+5,3%). Detrás se ubicaron las entregas de cales (+3,8%), artículos sanitarios de cerámica (+2,5%), hierro redondo y acero para construcción (+2,3%), cemento Portland (+1,3%), ladrillos huecos (0,8%) y placas de yeso (0,5%). Las bajas correspondieron a yeso (3,1%), el agregado ‘vidrio plano para construcción, tubos sin costura y grifería’ (-4,3%) y al asfalto (-5,5%).
En cambio, al comparar los despachos de abril de 2023 con los de abril de 2022, se observaron solo cinco subas y bajas en nueve de los trece grupos de insumos en que se desagrega el ISAC. Nuevamente, se destacaron los envíos al mercado de mosaicos graníticos y calcáreos, que resultaron 26,7% superiores a lo de doce meses atrás, también seguidos por los de hormigón elaborado (+8,5%), y luego por los despachos del agregado ‘vidrio plano para construcción, tubos sin costura y grifería’ (+8,4%), de cemento a granel (+6,4%) y de pinturas para construcción (+2,3%).En cambio, del otro lado de la línea se ubicaron las entregas al mercado interno de hierro redondo y acero para construcción (-0,1%), placas de yeso (-1,7%), cemento en bolsa (-6,7%), cales (-7,2%), asfalto (-8,5%), pisos y revestimientos cerámicos (-11,8%), yeso (-14,6%), ladrillos huecos (-19,9%) y artículos sanitarios de cerámica (-24,3%).
En lo que respecta a la actividad de la construcción específicamente, es importante resaltar la continuidad de la recuperación del número de puestos de trabajo formales ocupados hasta marzo del corriente año. Porque ello implica que la ejecución de obras medianas y grandes continúa ampliándose con relación a los meses previos, más allá de los vaivenes que puedan mostrar los despachos de insumos al canal comercial.
Específicamente, en marzo de 2023 el total de puestos de trabajo formales en la industria de la construcción ascendió a 442,3 mil, número que se ubicó 15,0% por encima de marzo de 2022 (+57,6 mil puestos de trabajos) y que resultó 63,1% mayor al promedio registrado durante la ‘cuarentena’ de abril-agosto de 2020 (+171,1 mil puestos de trabajo).
Por su parte, las perspectivas a corto plazo de los constructores siguieron estando dominadas por la moderación. Por un lado, entre los empresarios que realizan obras privadas, 62,5% consideró que el nivel de actividad se mantendrá estable en el trimestre mayo-julio del corriente año. Asimismo, 14,8% consideró que su empresa tendrá más obras y el restante 22,7% respondió que su nivel de actividad descenderá.
Por el otro lado, los ejecutores de obras públicas fueron más optimistas que los primeros, probablemente motivados por el impacto que suele tener el calendario electoral sobre la realización de obras públicas. Sin embargo, también estuvieron dominados por la moderación. Del total de los entrevistados, 47,6% respondió que espera un sostenimiento de su actividad, 20,4% un crecimiento y 32,0% una contracción.
En el caso de las perspectivas a mediano plazo de los desarrolladores inmobiliarios privados, en marzo se autorizaron1,47 millones de metros cuadrados en los principales municipios del país. Esto significó una mejora de 11,0% anual, lo que redujo la caída acumulada en el primer trimestre del año a 1,3% anual.
En síntesis, los despachos totales de los principales insumos siguen siendo elevados en términos históricos, pero se mantienen por debajo de los registrados en iguales meses del año pasado. Asimismo, la continua recuperación de los puestos de trabajo formales en la construcción constituye un indicador preciso del mayor número de obras medianas y grandes en ejecución. Y, por su parte, las perspectivas sectoriales a corto y mediano plazo continúan estando dominadas por la moderación.