La Subsecretaría de Infraestructura Escolar comenzó a ejecutar las reparaciones de más de 1.000 escuelas en toda la provincia, con el objetivo de mejorar sus condiciones edilicias de cara al transcurso del ciclo lectivo y con vistas al de 2024, tanto desde lo estructural como en lo que respecta a instalaciones de sistemas de calefacción.
En total, se realizará una inversión total que alcanzará los $13.000 millones para cubrir las necesidades edilicias de todo el próximo año. De este total, $9.000 millones ya fueron licitados y empezaron a ejecutarse. El resto está previsto ser destinado a las grandes reparaciones que surjan en los establecimientos, es decir obras de mayor magnitud y que requieren de más tiempo de ejecución.
Por lo pronto, por estos días se puso en marcha un plan de reparaciones que se ejecutará durante todo el receso de verano (desde enero a marzo), con la intervención de al menos 150 establecimientos que en la actualidad tienen más urgencias que el resto. En estos trabajos está prevista una inversión de $2.000 millones, que están siendo financiados con fondos íntegramente provinciales.
Estas intervenciones se están haciendo en edificios escolares que necesitan refacciones y mantenimiento dado que en la actualidad presentan inconvenientes estructurales como filtraciones de techos, y problemas en los sistemas eléctricos, instalaciones cloacales y conexiones sanitarias, entre otros arreglos.
“Queremos llegar al inicio del próximo ciclo lectivo (26 de febrero) con la mayor cantidad de escuelas en condiciones para el dictado de clases. Para que haya calidad educativa en la provincia tiene que haber sí o sí una infraestructura acorde. Y en ese camino estamos. Vamos a trabajar sin descanso para que los establecimientos que lo necesitan lleguen de la mejor manera para recibir a los docentes y alumnos en 2024”, señaló el subsecretario de Infraestructura Escolar, Carlos Daparo.
Entre los primeros trabajos que ya se arrancaron aparecen las escuelas Edmundo de Amicis, Nolasco Ferreyra y Bartolomé Mitre, todas de Capital. También está en ejecución el recambio de cubiertas de techo en la escuela Leandro Alem, de Guaymallén, entre otros establecimientos.
En tanto, la totalidad de las obras que se ejecutarán durante 2024 se realizará a través de coeficientes de impacto zonales. Está prevista una inversión oficial total de $13.000 millones, que serán financiados íntegramente con fondos provinciales. Con los trabajos se beneficiarán más de 400 mil alumnos de los distintos niveles educativos.
Se trata de paquetes de trabajos que se licitaron públicamente. Cada coeficiente de intervenciones cuenta con una inversión promedio de $200 millones y abarca establecimientos de todas las regionales de la provincia.
Daparo resaltó, además, que está prevista una inversión de $1.500 millones que ya se licitaron y adjudicaron para realizar intervenciones en sistemas de calefacción y en artefactos de gas que necesitan arreglos. “Con estas obras, más el recambio de al menos 2.000 calefactores en toda la provincia, tendremos cubiertas todas las necesidades edilicias que tengan las escuelas durante todo el próximo año”, agregó el subsecretario.
Una porción de este presupuesto comenzó a ejecutarse en 2023, y el resto se hará durante el primer semestre del año que viene. “Tenemos que seguir cumpliendo con los requerimientos que nos hace el Enargas para dejar en condiciones de seguridad los establecimientos. Este es un plan de obras que seguimos ejecutando y vamos muy bien”, indicó el funcionario.
Pintura para 600 escuelas durante el verano
Además de las reparaciones que están previstas para el receso estival y el resto del año, el subsecretario Daparo adelantó una acción directa que renovará la imagen de las escuelas de cara al inicio del próximo ciclo lectivo: el pintado de 600 escuelas. Se trata de una intervención que no se hizo de esta forma en los últimos 30 años en los establecimientos educativos de la provincia.
Para esto, están destinados $180 millones en más de 36.000 litros de pintura que servirán para embellecer, en una primera etapa, las fachadas de los edificios, muros y techos de cocinas, grupos sanitarios y algunos espacios más que lo requieran. Está tarea será cubierta en parte con las cuadrillas de la Subsecretaría y la Dirección General de Escuelas, además de las que trabajan en Servicios Generales. Y también habrá una colaboración de las comunidades educativas.
“Queremos darles una fuerte impronta a las reparaciones y puesta a punto de las escuelas en esta nueva gestión que comienza. Y este plan de pintado de los establecimientos es una señal de cambio. Vamos a revertir ese concepto equivocado que hay en la gente de que las escuelas están en malas condiciones. Todo lo contrario: se viene haciendo un muy buen trabajo en los últimos ocho años y nosotros vamos a continuar e intensificar”, manifestó Daparo.
Capacitación de celadores para arreglos menores
Otra de las novedades que tendrá la nueva gestión será la intervención directa de los celadores de las escuelas en arreglos menores que se produzcan a diario en los edificios, situación que hasta la actualidad no estaba ocurriendo.
En este sentido, Daparo indicó que “se va a capacitar a celadores para que realicen tareas de reparación y arreglos menores y urgencias. La instrucción se sostiene en tres rubros: plomería, electricidad y calefacción, con el objetivo de que los celadores sepan cómo intervenir un problema y resolverlo rápidamente, sin la necesidad de contratar una empresa para que lo haga”.
La capacitación será a través de los CCT y nuestro objetivo es llegar a capacitar a dos celadores por cada uno de los más de 1.300 establecimientos educativos que tiene la provincia”, remarcó el subsecretario.