La mesa directiva de CAVERA (Cámara Argentina de la Vivienda y el Desarrollo Urbano), conformada por su presidente, Dr. Ricardo D. Andino, su vicepresidente, Arq. Jorge D. Raspagliesi, y su secretario, Arq. José O. Vidal, mantuvo una reunión con el Secretario de Desarrollo Territorial, Hábitat y Vivienda, Lic. Rodrigo Aybar Perlender, y el Subsecretario de Hábitat y Vivienda, Dr. Santiago S. Sánchez Sorondo. El encuentro, que se desarrolló en un ambiente prolongado y cordial, se centró en tres puntos clave que CAVERA propuso discutir: el sistema de «Hipotecas Divisibles», el futuro de PROCREAR, y las medidas relativas a la Vivienda de Interés Social, particularmente en relación con el FONAVI.
Uno de los temas más relevantes de la reunión fue el reciente Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 1017, que introduce nuevas herramientas financieras destinadas a facilitar la construcción y financiación de viviendas. CAVERA expuso sus puntos sobre la nueva normativa, que regula figuras clave como los seguros para la pre horizontalidad, el derecho de superficie, y las hipotecas de obra futura y su divisibilidad. Según los representantes del Ministerio, el objetivo principal del DNU es crear un sistema financiero innovador que permita la financiación de viviendas desde su etapa inicial, contribuyendo a dinamizar tanto la construcción de nuevos proyectos como la adquisición de viviendas en stock.
Uno de los anuncios más destacados fue la implicación de los bancos en este sistema financiero. Las autoridades confirmaron que el Banco Hipotecario ya ha mostrado interés, y que el Banco Nación, dada su presencia territorial y volumen de operaciones, es un actor clave en este proceso. La posibilidad de que el sistema no solo sea útil para las obras del programa PROCREAR, sino que se convierta en una herramienta que impulse el financiamiento de viviendas a nivel nacional, fue destacada por el Gobierno.
En cuanto al futuro de PROCREAR, las autoridades explicaron que la decisión es transferir responsabilidades hacia las provincias y municipios que han actuado como entes ejecutores. De hecho, ya se han firmado acuerdos de financiamiento para 33.000 viviendas, con la participación de 29 jurisdicciones provinciales. Aunque Córdoba y Buenos Aires no tenían acuerdos previos, en estas provincias las gestiones se canalizaron a través de los municipios, lo que implica una reconfiguración de la distribución de tareas entre los distintos niveles de gobierno.
Sin embargo, el encuentro también permitió abordar las obras que no se podrán continuar mediante estos acuerdos. En estos casos, el mecanismo propuesto es la venta de las obras no continuadas a través de subastas públicas, para evitar que el precio sea fijado arbitrariamente. Las autoridades enfatizaron la necesidad de mantener acuerdos «interjurisdiccionales» con los entes ejecutores, ya que son ellos los que mejor conocen las particularidades de cada obra y los posibles compradores o desarrolladores interesados.
La reunión también abordó la problemática de la vivienda de interés social, con un foco particular en el FONAVI (Fondo Nacional de la Vivienda). CAVERA expresó su preocupación por el segmento de la población que no puede acceder a las condiciones actuales de crédito hipotecario, lo que limita el acceso a la vivienda para muchos argentinos. En respuesta, las autoridades destacaron el aumento significativo de los fondos destinados a FONAVI: para 2024 se prevé una asignación de 320 millones de pesos, con una proyección de 820 millones para 2025.
El DNU 1017 también establece la participación del Consejo Nacional de la Vivienda en la gestión de estos recursos, con el objetivo de garantizar que las provincias destinen estos fondos exclusivamente para proyectos habitacionales. CAVERA, en su intervención, propuso que se profundice el análisis sobre cómo orientar estos recursos hacia la financiación de aquellos que realmente necesitan acceder a una vivienda, más que en obras donde los Estados locales actúan como constructores. Esta propuesta fue aceptada dentro del marco del Consejo de Políticas de Infraestructura (CPI), al cual CAVERA pertenece, y se comprometió a acercar a las autoridades un ejemplar de las conclusiones más recientes de este espacio.
Sin duda, la colaboración entre entidades como CAVERA y el Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat será fundamental para diseñar y ejecutar políticas habitacionales que no solo respondan a la crisis inmediata, sino que también logren una planificación a largo plazo que permita satisfacer las necesidades de vivienda para todos los sectores de la sociedad.