Ecosan comenzó hace 25 años con una inversión inicial de USD 20.000, “la mitad la aportó mi padre y sirvió para adquirir seis baños químicos y una camioneta”, empieza contando Juan Pablo Rudoni, presidente de la empresa. Todo surgió por un viaje que realizó a Chile para ver el modelo de negocio que tenían en el país vecino, que no solo se aplicaba a eventos, sino que se estaba utilizando en la industria y la construcción.
Fue cuando decidieron traer los primeros seis baños químicos de Chile para comenzar con el negocio acá. En un principio, “alquilábamos baños químicos que, por aquel entonces, no eran considerados una unidad de negocio. A partir de allí, lleno de entusiasmo, un constructor italiano me preguntó qué era el artefacto que buscaba comercializar”. Rudoni le explicó que era un baño químico, que ayuda a la higiene y a la productividad de la gente. Y su respuesta fue que “ellos lo solucionaban con un pozo y cal, que la idea era un fracaso».
Esos primeros baños portátiles estuvieron parados durante 3 meses, con una camioneta y un chofer, “hasta que pude alquilar la primera unidad. Lo lograron en una obra que era un sótano, pero nos encontramos que el baño químico no entraba. Esto no nos iba a frenar, por lo cual lo desarmamos y lo volvimos a armar en la obra dentro del sótano. Si bien los inicios fueron difíciles, con el tiempo fuimos creciendo de forma sostenida y, desde la pandemia, a pasos agigantados”, cuenta.
¿Qué distingue a Ecosan?
Hacemos construcciones bajo la modalidad de “llave en mano» y, además, entregamos todos los planos conforme a obra con un manual de mantenimiento preventivo de la construcción. Nuestro trabajo se destaca por una manufactura de alta velocidad, estructura metálica, cerramientos con aislación termoacústica y una gama de terminaciones de excelente calidad, los módulos son ensamblados íntegramente en nuestra planta. Por sus dimensiones compactas permite ser transportado al sitio en una sola pieza, posicionarlo en el lugar planificado y conectarlo a la red de servicios para su uso el mismo día. Contamos con una amplia gama de productos de construcción modular que se ajustan a los requerimientos de cada cliente. Por ejemplo, realizamos la construcción de oficinas, laboratorios, viviendas industrializadas, campamentos en caso de catástrofes ambientales, arquitectura comercial, aulas, estaciones de reciclado, baños, cabina de vigilancia, etc. Además, todas las líneas de producción están bajo la norma ISO:14001 de medioambiente, siendo pionera en la industria nacional en sustentabilidad y con menor impacto ambiental, ya que se reutilizan los materiales y tiene menor uso de agua en el terreno en el que se instala. Cabe destacar que, desde lo sustentable, es mucho más eficiente y la huella de carbono es igual a 0.
¿Cuál es el fuerte de su modelo de negocio?
Somos una empresa argentina con más de 25 años en el mercado como proveedora de productos y servicios para la construcción. El foco de nuestras actividades es, por un lado, el proyecto, diseño y construcción de construcciones modulares industrializadas, ejecución de obras, diseños y fabricación de módulos habitacionales móviles, viviendas industrializadas. Dispone de dos fábricas, una en Don Torcuato y otra en Córdoba, donde se fabrican las construcciones industrializadas, con una capacidad de ejecución de 30.000 m2 anuales. También somos líderes en el negocio de rental y servicios de sanitarios portátiles, habitáculos móviles para duchas, cabinas de vigilancia, containers, shelters y la fabricación de soluciones de habitabilidad adaptadas a los más diversos usos en obras y eventos. Dispone de 11 sucursales en todo el país, abarcando logísticamente todo el territorio nacional.
¿A quién abastecen con estos productos y servicios?
A la industria de la salud, laboratorios, minería, oil y gas, construcción, eventos, entre otras.
¿Desde qué lineamiento trabajan?
Trabajamos bajo los lineamientos de las normas ISO 9001 e ISO 14001, que cubren los estándares de calidad a nivel internacional, mediante metodologías que transforman la concepción de la edificación tradicional, incorporando tecnología de avanzada en la calidad, la eficiencia y la sostenibilidad de los procesos. Desde el punto de vista ambiental, nuestro sistema de gestión de calidad y medioambiente certificado garantiza que cada producto cumpla íntegramente requisitos legales y técnicos, utilizando materiales que cuidan el medioambiente, con el objetivo de disminuir el consumo de energías no renovables y contribuir a la protección ambiental. Nuestra política interna se basa en cumplir y respetar los procesos y procedimientos, así como mejorar la eficacia del Sistema Integrado de Gestión Ambiental y de la Calidad para optimizar la performance ambiental de la empresa.
¿En qué tipo de proyectos de construcción e infraestructura han trabajado?
Ante la alta demanda residencial en Vaca Muerta, estamos con un proyecto residencial e inversión propia. Mediante un terreno en Añelo, en Neuquén. Se trata de un edificio modular de dos pisos como parte de la línea residencial, son unos 3000 m² divididos en 54 departamentos de 55 m² para la gente que trabaja en esa zona. Esta necesidad de alojamiento la detectamos a partir del gran movimiento de personas, que generó la construcción del gasoducto en la zona donde estuvimos al frente de las obras de una miniciudad en Vaca Muerta, la cual alberga a unos 1500 trabajadores del gasoducto Néstor Kirchner. Además, recibimos un premio en la World of Modular Award 2023 del Modular Building Institute (MBI), en EE. UU., en la categoría de Construcción de Centros de Salud, otorgado por el Instituto Norteamericano de Construcción Modular, por la construcción de los 11 hospitales modulares durante la pandemia, en 30 días. Además, realizamos de forma paralela el primer edificio sustentable del HSBC bajo el concepto modular y la infraestructura para empresas privadas como la planta para AySA, sede de la Base Operativa Pozos y Agua de Florencio Varela. Siendo uno de los proyectos más australes, la construcción del primer Hospital para Tolhuin, un pueblo de 2000 habitantes que está entre Tierra del Fuego y Ushuaia.
¿Cómo, contexto mediante, su empresa pudo seguir desarrollándose?
Dado que no contamos con préstamos privados ni financiación pública, nosotros seguimos operando a través de hacer ajustes basados en reinvertir absolutamente todo lo que es el capital propio y stockeandonos constantemente.
¿Qué metas se fijaron para 2023?
Tenemos mucha expectativa en el crecimiento de los sistemas constructivos modulares e industrializados que han demostrado ser muy efectivos. Cuentan con cualidades que los hacen muy atractivos para el mercado por la rapidez en la instalación, los costos fijos que no tienen mayores variaciones en el transcurso de la obra y, además, por el mínimo plazo de la obra que es fundamental, así como por la calidad y diversidad de las terminaciones. Vamos a seguir expandiéndonos en el mercado de la construcción modular a partir de nuevos proyectos e innovando en el desarrollo de productos con los más altos estándares de calidad que nos caracteriza.
¿Qué se encuentran desarrollando?
Nuestra línea de producto más dinámica es la que tiene que ver con la construcción modular orientada al área de salud, es en la que más demanda estamos teniendo. En las líneas de casa industrializadas también contamos con una alta demanda. Sacamos una línea para barrios privados, dado a que mucha gente está pensando en dejar la ciudad para instalarse en áreas más abiertas y esto le ofrece una buena calidad a un plazo de ejecución corto que le permite antes de fin de año estar instalándose en un nuevo lugar.
CIRCUNSTANCIAS
¿Qué factores impactaron de manera más significativa a su “nicho” durante los últimos tiempos?
Fundamentalmente, creo que la construcción modular está en pleno crecimiento porque hay una necesidad, sobre todo de velocidad de ejecución en obras, que el sistema tradicional no brinda. Eso posibilitó que este tipo de sistema constructivo tuviera una vidriera privilegiada y que las personas comenzaran a ver este tipo de construcción con buenos ojos, dado que tiene un valor diferencial en los tiempos de ejecución que en otro momento era inimaginable que se pudiera realizar. A raíz de eso, cambió de a poco la percepción de calidad de la gente, relacionada con la velocidad de construcción. Además, por la pandemia, se generó una elevada demanda de casas en áreas con mayor espacio y contacto con la naturaleza. Se trata de un requerimiento que se viene dando de forma sostenida.
¿Qué debería cambiar en Argentina para garantizar el futuro del sector?
Ayuda impulsar todo lo que sea créditos para la vivienda, incentivos para la construcción, una baja impositiva en el sistema constructivo sería muy importante para fomentar la inversión privada y la política pública de construcción de viviendas sociales haría crecer mucho el sector de la construcción en general y, en particular, el nuestro.
¿Qué escenario se imagina en el corto plazo para su industria?
La construcción modular a nivel mundial está explotando. Como nunca antes, está teniendo un crecimiento a nivel mundial a pasos agigantados. Si bien en Argentina el contexto país no contribuye, este sistema también está creciendo también a nivel local siendo elegido cada vez más por un target de familias que deciden construir en barrios alejados de los centros urbanos.